En esta oportunidad el objetivo principal de la salida no fue la pesca sino unos días de descanso, aprovechando que mi señora tenia vacaciones.El lugar elegido, por el entorno natural y la tranquilidad, fue Paranacito, mas precisamente una de las cabañas del complejo Pesquero Annemarie, que tienen todas las comodidades y una ubicación extraordinaria.Por su puesto yo tenia también la ilusión de pescar algo, aunque me habían comentado unos amigos que no era buena la pesca en la zona, pero yo como buen fanático, no me desalenté y me lleve de todo, varias cañas, distintos equipos y un buen surtido de carnadas: maíz remojado, lombrices, pasta, salame, filetes de dientudo, corazón, etc.
Arribamos al complejo 7.30 de la mañana con viento sudeste fuerte, 12ºc y el rió crecido por efecto de la sudestada, así que el panorama de entrada fue bastante desalentador, por lo que decidí cebar el lugar con maíz remojado de unos días antes y esperar un poco para hacer los primeros intentos con las bogas, en el resto de la variada no se me ocurrió ni pensar ya que el clima era realmente malo.
Pensando en que en los dos días siguientes que nos quedaban de estadía, las condiciones podían mejorar, decidí hacer los primeros lances de fondo con lombriz, para ver que especies picaban y si era posible guardar algunos bagres amarillos para usar de carnada buscando doradillos y taruchas.
Apenas cayó el plomo se sucedieron los piques de amarillos, bagres blancos, algunas boguitas y porteños de un tamaño descomunal.
Así pase la tarde, muy entretenido aunque con mucho frió y con el placer indescriptible de tomar unos buenos mates a la vera del rió,con mi señora y con un atardecer como para un concurso fotográfico.
Después de hacer un alto para preparar un buen asado, comencé a pescar de nuevo, y como suele ocurrir, las especies que picaban eran de muy buenos portes y distintas a la que se habían dado de día.El primer pique fue una violenta y larga llevada en una linea de flote con y correspondió a una tarucha de respetable tamaño, enseguida se sucedieron otras para luego cortarse tipo 22hs
Buscando nuevas respuestas comencé a dirigir los lances hacia el medio del curso del rió y a fondo, donde picaron enormes bagres sapo, armados y mas taruchas.Ya cansado y con frió, decidí dar por terminada la jornada de pesca tipo 23.30,
El segundo día de estadía, con la mejoría de las condiciones climáticas decidí ir por las bogas y doradillos.
La primer sorpresa llego a los 10 segundos de lanzar la primer linea para boga, encarnada con salame.Los piques se sucedían uno tras otro, y si bien los tamaños no eran descomunales, algunas rondaron el kilo de peso y ofrecieron una dura batalla, magnificada por lo liviano del equipo que decidí utilizar.
Muchos doradillos pero de pequeño tamaño aunque los que saltaban fuera del agua cazando eran de mejor tamaño que los que picaban que por supuesto fueron devueltos al agua con mucho cuidado de no lastimarlos.
Otro placer, el ritual de la parrilla a mi cargo y esta vez un rico pollo al galeto, preparado por mi señora
Otra noche mas de pesca y con las imagenes alcanza para describirla
Un "pequeño" dientudo que tomo una linea destinada a las taruchas , parecía un chafalote!!!
La ultima mañana el pique de taruchas era impresionante pero decidí desarmar los equipos temprano para estar tranquilo y almorzar antes de regresar.Como conclusión la pesca fue variada y de interesantes portes y en un lugar cómodo y con todos los servicios, algo a lo que uno habitualmente no esta acostumbrado cuando persigue estas especies en ámbitos generalmente inhóspitos.Por eso no dudo en recomendar este lugar para pasar unos días a pleno y desestresarse al máximo, con el agregado de la excelente pesca que podemos realizar sin mucho esfuerzo.
Un dato importante, en esta oportunidad rindio mejor la mojarra recien pescada encarnada viva que el bagre amarillo, la relacion de pique era de 5 a 1.
