Días muy calurosos y noches en las cuales se hace muy difícil poder dormir, falta aire en la ciudad y nosotros los pescadores tenemos una solución cercana, cómoda y económica, nos vamos a pescar al río y listo.
La noche del 30-12-11 un grupo de socios decidimos concurrir al muelle del Pejerrey Club de Quilmes y de paso despedir el año pescando, así es que nos encontramos a las 21:30 , un grupo integrado por José, Marco ,Alejandro ,Roberto ,Jorge, Sebastian, Quiroga y Javi ( de carnadas javis), quien nos proveyo de lombrices, sabalitos, bagres amarillos y filetes de boga y sábalo.El objetivo principal era divertirnos un rato e intentar pescar algún doradillo.El río se encontraba creciendo, con un fuerte viento del SE y bastante fresco, condiciones no muy favorables para esta pesca pero de todos modos la variada estaba muy entretenida.Después de realizar varios intentos, se nos ocurrió lanzar la linea de flote, haciendola derivar hacia el muelle y fenarla justo en la base de los pilotes para que la carnada quede flameando y despertar así el instinto cazador de los doradillos.La técnica dio resultados enseguida y los ataques y las clavadas se sucedieron una tras otra, con piezas de tamaño pequeño pero con mucha energía que nos hicieron disfrutar mucho la pesca.
El jueves 4-01-12 Roberto y yo (Sebastian), volvimos con la intención de repetir esta pesca pero nos encontramos con el río extremadamente bajo y escaso pique, pero con una agradable sorpresa, Roberto tuvo un pique importante a flote pescando a unos metros del muelle, nos llamaba la atención que no saltaba , lo cual me hacia temer que se escape al llegar debajo del muelle ya que yo sospechaba que se trataba de un dorado de importante porte, sin embargo cuando se dejo ver, no lo podíamos creer, se trataba de un hermoso cachorrito de surubí.
El río comenzo a subir pero ya era tarde y los doradillos no aparecían así que decidimos retirarnos, contentos por tan linda sorpresa y prometiendo volver pronto!.
