Bogas en el morro.

El instinto pescador nos llamaba incesantemente sin hacer caso al termómetro que en los días previos llegaba a los 38c y adelantaba para el domingo mas de 40c de térmica.La voluntad estaba intacta pero la razón nos decía que un viaje a Mar Chiquita para buscar la lisa era poco prudente, demasiado castigo para el físico de los que ya veníamos castigados por el calor, los cortes de luz y el trabajo, que en esta fecha suele ser algo mas estresante que de costumbre.
La solucion entonces era intentar una pesca de bogas en el morro del Pejerrey Club (teniamos informacion de que se estaban pescando muchas y de buen porte) y al mediodia huir hacia nuestra casa y escapar de las peores horas de sol y calor.
Por suerte, nuestro pequeño plan se dio a la perfeccion y realizamos una interesante pesca.
Llegamos alrededor de las 9 de la mañana, nos encontramos con un rio casi planchado, muchas algas en suspension y un aceptable nivel de agua.El dia estaba raro y una bruma, casi como un vapor hirviente envolvia todo.
Una vez en el morro, arme una caña fishing glass accion 7 con un reel escualo bacota, nylon asso flo 0.28 y chicote del 0.50 lo suficientemente fuerte para soportar el lance.
La linea era de dos anzuelos cormoran chicos y plomo de 160 grs.
El objetivo es lanzar siempre mas de 100 mts, ya que entre los 150 y 1000 mts de donde termina el morro hay zonas de tosca que atraen gran cantidad de especies y principalmente a la boga que se alimenta de el mejillon asiatico adherido a la misma.

Alrededor de las 10 de la mañana, aparecio la primera boga, si bien no era de un porte descomunal, sirvió para renovar el entusiasmo y me confirmo que la elección de la carnada era adecuada ( pequeños daditos de salame picado fino, encarnados de a tres por anzuelo )

Una brisa proveniente de tierra nos mantenía relativamente frescos y colaboraba en mantener el río planchado y en alejar nuestros lances del morro.
El agua comenzaba a moverse, habia comenzado a crecer y esto nos debia jugar a favor, solo faltaba esperar.
El pique sin ser frenetico momenzo a ser mas fluido y ademas mejoraron notablemente los tamaños de las bogas que en algunos casos rondaron entre los 2 kg, a casi 3kg en un par de ocasiones.Tambien salian a las perdidas algun bagre blanco o amarillo de tamaño mediano.

No muy grandes pero de un lomo ancho y gordas, bien combativas.Lindas bogas que presentaban una linda batalla y debian ser izadas con mediomundo para no poner en riesgo el equipo o perder la pieza.

Estábamos disfrutando una pesca de las mas gratificantes para los que nos gusta pescar en el río.

Ahora le toco el turno a mi compañero de sector, con quien veniamos charlando y pasando el tiempo.Un asiduo pescador del morro, un gran abrazo, para Cristian.
Un alboroto y una caña blanca intentando frenar las embestidas de una pieza que suponiamos era bastante grande nos llamo la atencion. Unos pescadores que estaban ubicados unos 20 metros antes del morro tuvieron la sorpresa del dia !!

Un lindo dorado de mas de 2, 5 kg que fue devuelto al agua como corresponde pero le regalo al pescador que lo obtuvo unos minutos de lucha inolvidables.

Tambien los mas chiquitos obtenian piezas, en este caso una mojarra obtenida a fondo basto para llenar de alegria a un pescadorcito con un gran futuro.
 Nosotros volvimos a lo nuestro, ya preparandono para el regreso a casa no sin antes disfrutar de unos 20 minutos donde todos pescaban y se obtuvieron en ese breve lapso casi 15 bogas

Algunas de muy buen tamaño como la de este pescador que accedió a que lo inmortalizáramos en la foto, un abrazo !!
 Ya empachados de pesca y con un calor abrazador decidi poner fin a la pesca y volver a casa, directo hacia la pileta que me esperaba con mi familia y amigos.
Una combinacion que nos permite disfrutar un domingo desdoblado en pesca y descanso familiar por cercania, buena pesca y rapido acceso.
Volveremos !!!
Gracias Roberto D Angelo por tu compañía incondicional, un gran pescador y excelente amigo.